L'Amuravela 1946

Escrita por
Antón de la Colona

Recitada por
Antón de la Colona

“Por la señal de la Santa Cruz,
de nuestros enemigos….”

Vaya Apostolado Glorioso,
ya pasaron aquellos tiempos
en que el Gremio de Cudillero
le ha quitado de Patrón
y le ha puesto de piquero.
Ahora ya sabes que te queremos,
queremos que seas Patrón
y que no seas Piquero.
A ver cómo Tú te portas
cuando vayamos al Cielo.

Vaya Apostolado Glorioso,
¿cuándo llegará ese día
que vayan de Cudillero a pescar
con las redis la sardina?
¿Quién lo dijera a nuestros padres,
a nuestros parientes y abuelos
cuando iban poner las redis
si no era en Pravia en Artedo
y decian: “Aparigua,
eso, eso, compañero
que cada vez que te miro
me arrancas el corazón
de pensar en los boliches
luego parejas y bous
que van pescar a la costa
del moro y luego a la playa del Sol
que pescan cuanto al mar echa
el Divino Redentor.
Vaya Tú, Apostol Santo,
que aquí estás en la Ribera,
quiero que traigas bonitos
y que no estén muy afuera
para que puedan pescar
barcos, botis y traineras.
Sobre cuestión de los precios
es excusado de hablar
ya ves lo que está pasando
con los precios del bocarti:
que el pequeño no lo quieren,
quieren mucho y que sea grandi.
Sobre cuestión del bonito
tráenos mucho, cerca y grande
para ganar el sustento
como han hecho nuestros padres,
que cuando Tú ibas al mar,
Apostolado Glorioso,
nunca te faltaba una pena,
cuando se quedaba en calma,
cuando se rizaba una vela,
pero ahora, si Tú quisieras,
si quieres venir al mar
iras a cargo de una vela
si sabis ensarear,
que el que no ha visto motoras
no ha visto cositas buenas,
que se ven andar las lanchas
sin palos, remos ni velas.
¡Chavalis que me escuchais,
os voy a contar un caso:
ya veis lo que está pasando
con la escasez de tabaco.
Y las chavalas del pueblo
ya pueden estar contentas
que todas se casarán
igual las viejas que nuevas
y los chavales del pueblo
verán lo que va a pasar,
que si por suerte o desgracia
nos hallamos en la mar,
el que no tenga mujer
se quedará sin fumar.
Este año hubo mal Otoño
como todos lo sabéis,
pero vimos en el pueblo
lo que nunca hablamos visto:
llegar a los Reyes Magos
con juguetes pa los niños
y venian tan alegres
y tan contentos los tres
todos de tan buen humor
que dejaron los juguetes
todos en el comedor.
Al reparto de juguetes
a los niños, he visto al Sr. Alcalde
con tanto amor y cariño
como si fuera una madre.
Nosotros enternecidos
al ver tan hermosa acción,
rompimos con ese himno,
ese canto tan divino
tan bonito, tan hermoso
que se llama “Cara al Sol”.
¡Madres, las que tenéis hijos,
rezad el Santo Rosario
por que se acabe esa guerra
para el bien de los cristianos
que el corazón se entristece
en esa guerra pensando
aunque solo sea por los niños
que puedan comer pan blanco!
Si no fuera por las almas
cariñosas y piadosas
como las que estoy mirando
ya estarián los pobrecitos
muchos en el Camposanto.

Mira cuantos aquí están
del Baluarte a la Ribera,
es por ver a un pescador
echaros “La Amuravela”
y relucir nuestras lizas
y brillar nuestras banderas
y traerlo en procesión
como véis, a la Ribera;
no me mires. Santo Hermoso,
y si tardo un poco, espera.

¡Que viva la Procesión
y todo el que la acompañe
y que viva el Señor Cura
y viva el Sr. Alcalde!
IViva Cudillero Hermoso
con todos sus habitantes
y los pobres marineros
por cariñosos y amantes!
¡Vivan la Luna y el Sol,
viva el oro y el dinero
y viva la Comisión
de la Fiesta de San Pedro!
¡Y también quiero que viva
la Guardia Civil del pueblo!
para que el día de San Pablo
acompañe al Sacramento!
¡Viva el Excelentisimo Franco!
¡Arriba España!
¡Viva el Ejército Español
y que vivan nuestros Jefes
que salvaron la Nación!
¡Arriba Falange Española!
¡Viva la Marina de Guerra!
¡Y con esto se acabó
señores. La Amuravela!

¡Amura vela! ¡Isa vela!
¡Fuego a babor! ¡Fuego a estribor!
¡¡¡Viva Pedro!!!